Un informe del SAS detalla los problemas para lograr equipos de proteccin para los sanitarios, especialmente desde el 16 al 20 de marzo
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, observa el robot del Hospital de Mlaga para realizar test PCRde coronavirus.
En voz baja, a gritos, en pblico y en privado, los sanitarios andaluces han venido denunciando desde el minuto uno cmo han tenido que combatir contra el SARS-CoV-2 casi sin armas. Desde que estall la pandemia, la escasez de equipos de proteccin individual (EPIs) ha sido uno de los grandes caballos de batalla, tanto para los profesionales como para la propia Junta de Andaluca, que por momento se vio incapaz de garantizar el suministro no slo de mascarillas, sino de batas, guantes o gafas protectoras en un mercado colapsado y que el propio presidente andaluz, Juanma Moreno, ha calificado en ms de una ocasin como un mercado persa.
Pero ms all de declaraciones, un informe oficial del Servicio Andaluz de Salud (SAS), al que ha tenido acceso EL MUNDO de Andaluca, desvela la gravedad real de la situacin de desabastecimiento que vivi la sanidad pblica andaluz y que alcanz su punto lgido durante cinco das, los primeros desde que el Gobierno central decret el estado de alarma.
El informe, elaborado por la subdirectora de Compras y Logstica del SAS, Salud Rivero, habla literalmente de una situacin crtica entre el 16 y el 20 de marzo. Fueron los cuatro das en los que la sanidad andaluza estuvo ms expuesta y tambin cuando los contagios empezaron a multiplicarse.
En esos das, ni los pedidos que haba realizado la Administracin andaluza llegaban ni el Gobierno central, que haba centralizado los procesos de compra, fue capaz de atender todas las necesidades.
El caos comenz, segn el informe oficial en poder de este peridico, cuando el decreto 463/2020 por el que el Gobierno central decreta la alarma y establece el control sobre esta material sanitario y la obligacin de los fabricantes de comunicar sus existencias.
A partir de ese momento, los mismos proveedores del sistema sanitario pblico andaluz retiran los pedidos que ya estaban firmados, a lo que suma la incautacin de partidas de material, como el stock de mascarillas de la fbrica de Alcal la Real (Jan) que era uno de los principales suministradores del SAS.
En esos das, adems del milln de mascarillas que fue requisado, otros dos pedidos, de 400.000 mascarillas FFP2 y 100.000 FFP3, son anulados por los proveedores ante el riesgo, dice el informe, de que corrieran la misma suerte y fueron requisados.
En la semana del 16 al 20 de marzo se llega a una situacin crtica, describe la subdirectora de Compras y Logstica del SAS en el informe, cuatro pginas en las que cuenta con detalle el proceso de adquisicin de EPIs y las dificultades encontradas y que fue remitido al juzgado de Jan en el que se investiga la denuncia presentada por el Colegio de Enfermera de esa provincia contra la Junta por no garantizar medios de proteccin a los profesionales sanitarios.
Sanitarios contagiados
La ausencia de esos recursos explica en gran medida la elevadsima incidencia de contagios entre los sanitarios en Andaluca. De hecho, segn los datos del Instituto Carlos III, los andaluces han sido los ms castigados de toda Espaa por el Covid-19 puesto que tres de cada diez contagiados en la comunidad han sido profesionales de la sanidad.
A la fecha en la que se redacta el informe, el 31 de marzo, el SAS tena firmados 36 pedidos de material de proteccin, desde mascarillas a batas, pasando por monos, gafas y pantallas, pero slo ocho haban llegado. Los dems o haban sido anulados por el proveedor o requisados por el Gobierno o bloqueados en aduanas internacionales.
Aunque los sindicatos y colegios profesionales insisten en que el suministro ha escaseado durante toda la crisis sanitaria, la autora del informe y responsable de las compras en el SAS explica que la situacin crtica de esos cuatro das se resolvi con la distribucin del stock de mascarillas FFP2 segn nmero de casos confirmados y el reparto de mascarillas quirrgicas, 900.000, a los almacenes centrales de cada provincia para que de ah fuesen repartidas luego a los centros asistenciales.
El documento relata igualmente cmo en aquellos das el acceso a los mercados internacionales, especialmente el chino, era extraordinariamente complicado y cmo los fabricantes y los intermediarios se aprovecharon de la situacin. En esas fechas, exigan el pago del 50% del pedido por adelantado y el otro 50% a la entrega del material. Sin opciones.
Las condiciones leoninas para adquirir mascarillas y dems EPIs forzaron incluso al Gobierno andaluz de Juanma Moreno a una modificacin normativa, del decreto ley 3/2020, para poder hacer pagos por adelantado.
A finales de marzo, en plena explosin de la pandemia del coronavirus, el SAS, asegura el informe, tena asegurado el suministro de material de proteccin durante diez semanas con pedidos de 9,4 millones de mascarillas quirrgicas y 400.000 FFP2.
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