El Gobierno quiere dejar bien atado el final del estado de alarma decretado por la crisis del coronavirus y el paso a lo que ha venido en llamar « nueva normalidad ». Por eso, el Consejo de Ministros aprobar el martes 9 de junio un Real Decreto-ley « de medidas urgentes de prevencin, contencin y coordinacin para hacer frente a la crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19 », en el que regula cmo se controlar la pandemia despus del estado de alarma.
El decreto, a cuyo borrador ha tenido acceso EL MUNDO, fija el marco para el levantamiento de las medidas de contencin « de modo gradual, asimtrico, coordinado con las comunidades autnomas y adaptable a los cambios de orientacin necesarios en funcin de la evolucin de los datos epidemiolgicos y del impacto de las medidas adoptadas ».
Se establece una serie de restricciones que debern llevar a cabo forzosamente las autonomas. As que, de facto, se mantendr gran parte de las medidas precautorias del estado de alarma, si bien ya gestionadas por las regiones y no por el mando nico.
De esta forma, el Ejecutivo se asegura tutelar la « nueva normalidad », ya que todas las limitaciones comerciales, deportivas, mdicas o sociales que establecer el decreto « sern de aplicacin en todo el territorio nacional hasta que el Gobierno declare la finalizacin de la situacin de crisis sanitaria ». Por qu? La respuesta es muy sencilla: Para estar preparados « ante la posibilidad de nuevos brotes » de coronavirus.
Test PCR a todo « caso sospechoso »
« Las Administraciones competentes debern asegurar el cumplimiento de »… sta es la frase ms repetida en el borrador. El Gobierno quiere encomendar a las autonomas la vigilancia estricta de que se cumplen todas las limitaciones.
Entre otras, el cumplimiento estricto de las normas de aforo, desinfeccin, prevencin y acondicionamiento de los establecimientos comerciales, as como el mandato vinculante de hacer test PCR a todo « caso sospechoso », velar por que el uso de la mascarilla se cumpla a rajatabla y garantizar que haya material sanitario suficiente.
Las autonomas debern velar por el cumplimiento de la distancia de seguridad, de 1,5 a dos metros, en los centros educativos, en los establecimientos comerciales, en las instalaciones deportivas y en los recintos culturales. « Cuando no sea posible mantener dicha distancia de seguridad, se observarn las medidas de higiene adecuadas para prevenir los riesgos de contagio ».
En la « nueva normalidad » tambin se mantendr intervenido el sector del transporte de viajeros, como en el estado de alarma. El Ejecutivo regular la oferta de plazas y el volumen de ocupacin, y obligar a Aena a poner a una parte de su plantilla y de sus recursos al servicio de Sanidad para el control sanitario de la entrada de pasajeros internacionales en los aeropuertos.
El borrador del decreto lleva las firmas del ministro de Sanidad, Salvador Illa, y el de Transportes, Jos Luis balos, y estar listo para cuando algunas provincias, islas y unidades territoriales pasen de la Fase 3 y, « eventualmente », expire la vigencia del estado de alarma.
Sern las comunidades autnomas las que puedan decidir, « con arreglo a criterios sanitarios y epidemiolgicos », el fin de la Fase 3 en cualquiera de sus zonas. Eso s, el decreto alerta de que « la actual evolucin favorable en la contencin de la pandemia no exime a los poderes pblicos de su deber de organizar y tutelar la salud pblica a travs de medidas preventivas y de las prestaciones y servicios necesarios ».
El documento justifica que las medidas de incentivo de la normalidad posterior al estado de alarma se deben adoptar con urgencia. Por « la pervivencia » de la pandemia, claro, pero tambin por « la naturaleza y evolucin imprevisible de la misma », que aconsejan « la inmediata modificacin de aquellos preceptos previstos en la legislacin en vigor para hacer frente a este tipo de situaciones, a fin de garantizar una mayor eficacia y coordinacin en la adopcin de medidas para afrontarlas ».
« Levantamiento gradual »
Y no se refiere slo « a futuro, con carcter general », sino tambin « en el momento actual, ante la contingencia que supondra la aparicin de eventuales rebrotes de transmisin comunitaria del Covid-19 ».
Pero ahora « se pretende culminar » el proceso de desescalada « con el gradual levantamiento y definitiva prdida de eficacia de las medidas en todos los territorios si, como es previsible, todos ellos superan todas las fases ». Ms de media Espaa entrar en Fase 3 el lunes 8 de junio, mientras Madrid y Barcelona, entre otras zonas, seguirn en Fase 2.
« Se ha querido as acompasar el proceso final de desescalada de las medidas de contencin con el mantenimiento del estado de alarma, de manera que el levantamiento gradual y coordinado de las mismas, como se prev en el Plan para la Transicin hacia una Nueva Normalidad, permitiera no comprometer el logro de los objetivos de contencin », justifica el borrador del real decreto-ley.
« A este respecto debe destacarse la favorable evolucin de la situacin registrada ya durante la quinta prrroga », se congratulan los ministerios de Sanidad y Transportes.
Los gobiernos autonmicos tambin debern incentivar la fabricacin de medicamentos « esenciales », y se le dar « continuidad » a la obligatoriedad de suministrar toda la informacin a Sanidad. Incluso « se establecen nuevos deberes de informacin en situaciones de emergencia para la salud pblica ».
El Ministerio de Sanidad seguir monitorizando a los fabricantes de medicamentos: controlar desde su stock disponible hasta la cantidad suministrada en la ltima semana o la previsin de ventas.
Otras medidas se refieren a la prevencin en el entorno de trabajo. Entre ellas, se deber controlar la correcta « ordenacin de los puestos de trabajo », o la organizacin de los turnos para evitar aglomeraciones. Igualmente, el mantenimiento de las medidas de higiene bsicas que se aprobaron en el estado de alarma.
Por ltimo, las autonomas debern coordinar las residencias de mayores con los hospitales, tras el fracaso durante el pico de la pandemia.
Multas de 100 euros por no llevar mascarilla
El borrador del real decreto-ley incluye un rgimen de sanciones. El artculo 31 de la norma estipula que « el incumplimiento de las medidas de prevencin y de las obligaciones establecidas en este real decreto-ley, cuando constituyan infracciones administrativas en salud pblica, ser sancionado » en los trminos previstos en la Ley General de Salud Pblica.
El incumplimiento de la obligacin de uso de mascarillas establecido « ser considerado infraccin leve » y sancionado « con multa de hasta cien euros », reza el documento. « La vigilancia, inspeccin y control del cumplimiento de dichas medidas, as como la instruccin y resolucin de los procedimientos sancionadores que procedan, corresponder a los rganos competentes de las comunidades autnomas y de las entidades locales », aade el borrador.
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